El Lunes Santo de 1953, la Hermandad de Santa Marta realiza su primera estación de penitencia a la Catedral. La fotografía está tomada en la puerta de los “Palos” de la Catedral. Podemos observar el misterio en su estado original, tal como lo imaginó y creó el genial Luis Ortega Brú, todavía sin la Virgen de Sebastián Santos Rojas. La cuadrilla de costaleros profesionales que portaba el paso era la de Manuel Bejarano Rubio.
Manolo era capataz a la antigua usanza, era capataz del muelle y de cofradías. Además él fue el que dotó al Señor de su característico paso racheado, que surgió fruto de la casualidad una noche de Lunes Santo en el regreso del misterio de Santa Marta al compás del "tintineo" de una cantimplora colgada de una trabajadera del "barco" de San Andrés.