Para evitar problemas de huesos y musculares, los fisioterapeutas aconsejan a los costaleros trabajar con antelación la fuerza, la resistencia y la coordinación para que el trabajo físico sea lo más efectivo posible.
Según el Secretario General del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid, José Santos, en muchos casos, "el sedentarismo y los cambios laborales de los últimos años han reducido el desarrollo físico de los trabajadores a favor del desarrollo intelectual".
Por esta razón, los antiguos costaleros solían contar con una preparación física mejor que los actuales. "Sin embargo el esfuerzo requerido para desempeñar esta labor sigue siendo el mismo", añade Santos.
Con el objetivo de "prevenir dolores y posibles lesiones, en muchos casos evitables", los fisioterapeutas madrileños recomiendan:
- Caminar mirando al frente durante todo el trayecto, evitando tensar el cuello y con la espalda recta.
- Pisar con toda la planta del pie.
- No flexionar del todo las articulaciones del codo y la muñeca.
- Mantener la musculatura abdominal contraída (meter los riñones).
- Utilizar medidas protectoras como fajas o vendajes funcionales para las zonas con mayor riesgo de sufrir lesión.
- Realizar ejercicios de estiramiento antes de sacar el paso y durante los relevos.
- Asimismo, el Colegio de Fisioterapeutas aconseja beber agua en pequeñas cantidades y de forma continuada durante el trayecto, así como llevar un calzado flexible y cómodo, preferiblemente alpargatas, zapatillas o botines, reforzando los pies y tobillos con vendajes funcionales.
Según el Centro de Asistencia al Costalero, las dolencias más comunes entre los costaleros en la Semana Santa del 2008 fueron los dolores de gemelos, (42% de las personas atendidas), los lumbares (41%) y cervicales (40%), siguiéndoles los hormigueos en los brazos (un 34% de casos), el dolor dorsal (32%), hombros (24%) y rodillas (10%).